La relación entre un emprendedor y una Lanzadera


Frecuentemente leemos en medios de comunicación y publicaciones especializadas la aparición de Plataformas y Lanzaderas que apoyan a miles de emprendedores en todo el país. Estos entornos empresariales suponen una puerta de entrada a la actividad económica de increíble valor, pero es necesario afrontar una relación entre el emprendedor y ellas con objetivos claros y posibilidad de evolucionar en el futuro.

La solicitud de inversión

La primera etapa consiste en la presentación del proyecto y la solicitud de inversión. Sin duda es uno de los momentos más difíciles, dado que a este tipo de plataformas intenta acceder mucha gente emprendedora con muy buenas ideas.

La elaboración de un proyecto firme, con posibilidades reales de desarrollo futuro y de ser sostenible por sí mismo son algunos de los factores que más tendrán en cuenta. Posteriormente los intereses propios de la plataforma o Lanzadera, en función también del tipo de emprendedores al que vaya dirigido, dictaminará en buena medida la elección del proyecto ganador.

Unos años de mantenimiento

La rentabilidad en estas inversiones es solicitada al cabo de unos años, por lo que al principio se vive la época más dulce como emprendedor. Se dispone de presupuesto suficiente y se puede desarrollar la idea de negocio sin ningún inconveniente.

Los objetivos en esta etapa son darse a conocer, publicitar al máximo el producto o servicio e ir buscando una metodología de sostenibilidad empresarial que vislumbre la desconexión futura con la Lanzadera.

La decisión de futuro

Al cabo de unos años, la Lanzadera o plataforma plantea 3 opciones al proyecto emprendedor. Muchas veces ofrece una nueva inversión para ofrecer un plazo más amplio de desarrollo. En otras ocasiones le motiva a buscar inversión externa para seguir funcionando. Por último, es posible que el proyecto haya conseguido el desarrollo suficiente como para generar beneficios y autoabastecerse económicamente hablando.

Como es lógico, esta última fase es la buscada por todos los emprendedores y no siempre es fácil conseguirla. Una buena idea para un emprendedor no siempre funciona en el mundo comercial o es ahogada por la competencia, que iguala o supera el proyecto en diferentes ámbitos.

La búsqueda de inversores también se está potenciando con encuentros entre emprendedores y profesionales para conseguir sinergias económicas entre ambos. Sin embargo, la presión de un inversor o grupo de inversores es mucho mayor, dado que ellos sí que buscan una rentabilidad a corto plazo.